Tech4Peace

El desafío de los derechos digitales y la seguridad en una zona en conflicto

En un mundo donde las amenazas en línea y la desinformación pueden tener consecuencias devastadoras, Tech4Peace promueve los derechos digitales y el acceso a la verdad. Esta organización de base, fundada en 2016, empezó su trayectoria con el objetivo de evitar la difusión de información falsa en Irak.

Principales recursos del grupo:

• Una aplicación con la que los usuarios pueden verificar los hechos de imágenes, videos y texto
• Una plataforma de aprendizaje en línea para que las personas y las organizaciones aprendan a verificar los hechos y a mejorar su estado de seguridad
• Una línea de ayuda para la seguridad digital de activistas, periodistas, mujeres y muchos otros

Desde que pusieron en marcha la línea de ayuda en 2023, Tech4Peace ha gestionado más de 3000 casos en el primer año, ayudando a personas de países como Irak, Estados Unidos, Ucrania, India, Reino Unido, Siria, Túnez, Jordania, Turquía, Marruecos, Emiratos Árabes Unidos y Libia. Estos casos implican cuestiones como el hackeo, el chantaje, el discurso de odio y la sextorsión.

Aws Al-Saadi, su fundador y presidente, describe la misión, "Para nosotros Tech4Peace significa lograr que las personas piensen dos veces antes de compartir noticias falsas o discurso de odio, y que conozcan sus derechos digitales y su seguridad digital".

Con esto en mente, el grupo tiene como objetivo generar conciencia mediante el desarrollo de competencias, campañas, promoción, investigación, verificación de hechos, innovación técnica y otros medios. El eslogan del grupo, "Se acaba con nosotros" refleja su compromiso de desenmascarar la mentira y de resolver los problemas alimentados por rumores.

El éxito de Tech4Peace se debe a su dedicado equipo de voluntarios. La organización comparte sus conocimientos y su experiencia promoviendo la formación en derechos digitales, seguridad digital, pacificación en redes sociales, liderazgo y verificación de hechos.

Riesgos de la crítica al status quo

La misión de la organización implica su propia serie de desafíos. Tech4Peace ha enfrentado resistencia y amenazas digitales durante años, y los riesgos han aumentado desde la Revolución de Octubre de Irak en 2019. Al-Saadi explica que la proximidad del grupo con las manifestaciones (una necesidad dados sus esfuerzos de verificación de los hechos) ha generado peligros de seguridad.

"Las amenazas digitales pueden adoptar distintas formas, por ejemplo, el hackeo de cuentas, o ataques a nuestro sitio web. Es importante que Tech4Peace se proteja contra estas amenazas", indica Al-Saadi.

Antes de unirse al Proyecto Galileo, Tech4Peace llevaba muchos años confiando en el plan gratuito de Cloudflare. Sin embargo, dos ataques DDoS de gran volumen que tuvieron lugar en julio de 2022, uno de los cuales de 4,6 millones de solicitudes procedentes de 146 países, dejaron sin funcionamiento durante unas horas el sitio web y la aplicación de verificación de hechos.

Como el trabajo de la organización se hace en gran medida en línea, es fundamental evitar las interrupciones. En Irak específicamente, Al-Saadi explica que los usuarios dependen de la aplicación y de la plataforma de verificación de hechos para las noticias. "Nuestra presencia web es imprescindible para nuestra misión, ya que nos ayuda a compartir conocimientos y a generar conciencia", explica.

La velocidad también nos preocupa, indica. "La desinformación y el discurso de odio son peligrosos y pueden difundirse con rapidez, por lo tanto, es necesario acabar con ellos lo antes posible.

Cuando alguien de Cloudflare le habló del Proyecto Galileo en la Cumbre para la Democracia de 2024 en Seúl, Al-Saadi envío una solicitud y fue aprobada. Tech4Peace pudo actualizar de forma gratuita al plan Business para mejorar sus defensas digitales. Las prioridades actuales del grupo son, entre otras, actuar contra los ataques DDoS, el hackeo de sistemas y la manipulación de contenido.

"Sin la protección de Cloudflare, nuestro sitio web y nuestra aplicación serían vulnerables a los ataques, lo que podría obstaculizar nuestra capacidad para proporcionar información fiable en el momento oportuno a aquellos que más la necesitan, así como dificultar nuestros esfuerzos para resolver casos urgentes mediante la línea de ayuda, especialmente aquellos que podrían afectar a periodistas, activistas y mujeres en situaciones de violencia de género", explica Al-Saadi.